HARTHEIM, EL CASTILLO DE LA EUTANASIA NAZI (La Aventura de la Historia, El Mundo)

Leer pdf en: Hartheim Aventura de la Historia  Montserrat Llor

HARTHEIM1 articulo¡Cuánta maldad albergó en su interior! El castillo de Hartheim, construido a finales del siglo XVII en Alkoven, a 14 km de Linz, Austria, anexo al campo de Mauthausen fue escenario de terror durante la época nazi. Rodeado de verdes campos por los que paseamos, su aspecto blanco, elegante e imponente contrasta con los actos terribles, experimentos médicos y asesinatos en masa que tuvieron lugar en su interior durante la segunda guerra mundial. Allí, los médicos de los SS, por orden expresa de Hitler, debían eliminar sistemáticamente a los deficientes físicos y mentales internados en las instituciones especiales de Alemania. Eso fue sólo el comienzo.

Esta acción tenía un nombre: Eutanasia y un ejecutor: el doctor Karl Brandt, médico personal de Hitler que, en su escalada de poder, sería comisario del Reich para la salud y llegaría a disponer, para la aplicación del denominado programa eutanasia T4, de 350 médicos y seis instalaciones de gaseo repartidas por Alemania: Bernburg, Brandenburg, Grafeneck, Hadamar, Sonnenstein y Hartheim.

Rudolf Lonauer, el director de Hartheim entre los años 1940 y 1945 llevó a cabo la tarea encomendada de forma sistemática, sin piedad. Al finalizar la guerra acabó suicidándose junto con su familia, la misma que aparece en la foto.

En Hartheim, “la casa del reposo” como era apodada cínicamente, fueron eliminadas más de 30 mil personas aunque las cifras varían según la fuente. También terminaron aquí sus vidas unos 500 españoles republicanos. Unos autobuses grises conducían directamente a las víctimas hasta el interior, lugar siempre oculto a los ojos de los veciHARTHEIM2 articulonos.

Me impactó la visita al interior del lugar, tan bonito como tétrico, ver fotografías de su exposición donde los doctores y enfermeras parecían humanos y felices, iban de excursión siempre sonrientes mientras, en su día a día, eliminaban o experimentaban implacablemente con seres humanos. Lo mismo decían dos deportados españoles con los que visité el lugar: José Alcubierre y Esteban Pérez, ambos retratados en “VIVOS EN EL AVERNO NAZI”. Hoy, Esteban tiene 103 años, es el superviviente más longevo. Pero allí dentro recuerdo que no pudieron soportar tanta presión y rompieron a llorar. Mientras, en una de las salas, una guía austríaca del centro proyectaba imágenes de un pasado vergonzoso para la población y se lamentaba de lo ocurrido.

¿Por qué eliminaron a deficientes, enfermos y ancianos? Lo hicieron bajo el manto de la compasión hacia esos seres a los que denominaban improductivos, con la excusa de evitar una carga para los familiares y al propio Estado. Consideraban que eran, según el ideario nazi, «vidas indignas de ser vividas» y un impedimento para la mejora genética de la sociedad.

También se utilizó este programa, con la denominación Aktion 14f13 o “trato especial”, para eliminar de enfermos y débiles de los campos de concentración de Gusen, Dachau y Mauthausen.

Contundente fue para mí la lectura de “Exterminio de enfermos mentales en la Alemania nazi”, de Alice Platten Hallermund, publicado en Alemania en 1948. Esta doctora fue miembro de la comisión médica que actuó en el juicio del tribunal de Nuremberg contra médicos acusados de crímenes contra la humanidad.

Artículo: https://montserrat.llor.net/wp-content/uploads/2015/02/Hartheim-Aventura-de-la-Historia.pdf